Por el Arq. Jorge Ortiz
“La arquitectura es un juego magistral, perfecto y admirable de masas que se reúnen bajo la luz. Nuestros ojos están hechos para ver las formas en la luz y la luz y la sombra revelan las formas…”.
-Le Corbusier
La luz es parte esencial de la arquitectura, ya sea natural o artificial, nos ayuda a resaltar cualidades del espacio, diseñar la iluminación para cada lugar es muy importante pues nos ayudará a crear un ambiente adecuado.
La visión de un espacio puede ser modificada por medio de la luz,no necesitamos remodelar el lugar para darle un cambio. La luz nos ayuda a dirigir la mirada hacia los detalles, ayuda a conectar espacios entre el interior y exterior, delimitar zonas. La forma en la que se distribuya la iluminación, así como, la cantidad logrará dar un aspecto y una sensación diferente.
Podemos lograr diferentes efectos dependiendo de en donde coloquemos la iluminación, si se coloca en los muros logramos darle importancia a la textura del mismo, una luz directa hacia un objeto nos ayuda a darle una jerarquía ante todo lo que lo rodea, podemos iluminar elementos arquitectónicos como columnas, escaleras, jardines y de esta forma llamamos la atención de las personas que habiten en ese espacio.
También podemos usar la iluminación para dar profundidad en un pasillo, marcar un acceso, resaltar planos diferentes en muros, en una exposición de arte sirve para resaltar las piezas importantes de una colección o lograr un juego de sombras en un escultura.
La iluminación puede ser con color y esto nos permitirá dar una sensación extra al espacio, los colores influyen mucho en la percepción de la persona, ya sea que nuestro diseño sea un lugar cálido o un lugar de meditación, podemos usar lámparas con color o usar la iluminación para resaltar el color del mismo elemento.